sábado, 25 de agosto de 2012

Estaba escrito: El lugar es aquí y el momento es ahora

En mi época de estudiante universitario era un lugar común el temor a "enfrentarse a la hoja en blanco". Con esta expresión reconocíamos dentro de nuestro proceso de aprendizaje que escribir no siempre es una acción innata y que, por el contrario, requiere de una disposición especial y de una preparación concienzuda y responsable. En ese entonces la investigación, las entrevistas y la consulta de fuentes eran herramientas imprescindibles que con alguna preocupación fuimos adoptando en nuestro quehacer diario.

Agradezco esa formación que recibí porque aún ahora, casi dos décadas después, esas herramientas han sido de constante uso en cualquiera de los textos, personales, laborales o comerciales, que en algún momento he tenido que redactar. Ello sin desconocer que aún sentimos ese miedo de enfrentar la "pantalla en blanco" de nuestra era digital.

Sin embargo, es claro para mí que en este punto nuestro criterio ha madurado, de una u otra forma, y la opinión que nos formamos de la vida y sus hechos es alimentada por muy diversos e interesantes puntos de vista. Considero que llegó el momento de aventurarnos a opinar respecto a diferentes temas, rompiendo algunas reglas que hasta ahora habíamos cumplido al pie de la letra. Es otra de las ventajas que nos imponen los nuevos tiempos, apalancados en las tecnologías actuales.

Punto de partida es un blog de opinión abierta y totalmente controvertible, sin autoritarismos pretendidos, con un espectro de temas variado, pero siempre con el propósito de conocer y mostrar diferentes puntos de vista y diferentes experiencias de vida, propias y ajenas. Pero principalmente, es un ejercicio de disciplina personal y una válvula de escape que me debía desde hace un largo tiempo. Es una tarea sin pretensión de halago o reconocimiento público, más bien, es una herramienta de autocrítica a la que había huido para refugiarme en la cómoda posición de mudo espectador.

Agradezco profundamente a quienes se arriesguen a acompañarme en esta experiencia y sólo espero de ellos una crítica permanente y franca. Dedico éstas y todas las líneas que vendrán a mi esposa, Doris, y a mis hijas, Natalie y Stephanie, en quienes encuentro mi Punto de partida: aquí y ahora.



“Nunca es demasiado tarde o, en mi caso, demasiado pronto para ser quien quieras ser.
No hay límite en el tiempo, empieza cuando quieras,
puedes cambiar o no hacerlo, no hay normas al respecto.
De todo podermos sacar una lectura positiva o negativa, espero que tú saques la positiva.
Espero que veas cosas que te sorprendan;
espero que sientas cosas que nunca hayas sentido;
espero que conozcas a personas con otro punto de vista;
espero que vivas una vida de la que te sientas orgullosa;
y si ves que no es asi,
espero que tengas la fortaleza para empezar de nuevo.”

Una carta a su hija
Benjamin Button, El curioso caso de Benjamin Button

No hay comentarios.:

Publicar un comentario